Historia de las Fiestas Julias de Santa Ana
Las Fiestas Julias de Santa Ana, es el nombre popular con el cual se les conoce a las fiestas patronales de la ciudad de Santa Ana, en honor a Nuestra Señora Santa Ana.
Estas festividades son celebradas año con año del 17 al 26 de julio, son vividas a lo grande por los santenecos y por otras personas que visitan la ciudad en estos días. Actualmente se consideran como una de las más importantes de El Salvador.
Como mencionamos anteriormente, estas fiestas están dedicadas a Nuestra Señora Santa Ana y tras ello hay una interesante historia que conocer, mediante la cual nos remontamos a los inicios de este maravilloso lugar.
La historia
La imagen de la Señora Santa Ana, es de origen guatemalteco y data desde hace más de 400 años, aunque la fecha exacta no se tiene registrada.
La creencia popular, cuenta que la imagen era trasladada por unos fieles hacia la ciudad de Esquipulas y decidieron pernoctar en la zona que actualmente se conoce como Apanteos, colocando la imagen debajo de una ceiba ubicada en el centro de una plaza.
La mañana siguiente al querer retomar la marcha no pudieron pues la imagen se había hecho demasiado pesada, sin poderla levantar. Los pobladores, por curiosidad quitaron las envolturas al pesado bulto quedando al descubierto la imagen de quien es, desde aquella fecha la patrona de la ciudad morena.
Los festejos patronales tienen su origen el 26 de julio de 1569, cuando el entonces obispo de Guatemala, Bernardino Villalpando visitó Sihuatehuacán (nombre antiguo de esta población), que en lenguaje nahuat significa Ciudad de las Sacerdotisas, quedando impresionado con la belleza del lugar bautizándolo así como Santa Ana.
Desde entonces, las fiestas patronales se celebran en el mes de julio, realizándose a partir del día 17 y culminando el día 26 con una procesión concurrida por la mayor parte de santanecos que profesan la fe católica.
¿Quién es santa Ana?
De acuerdo a la tradición católica, santa Ana, casada con Joaquín, fue la madre de María y por tanto la abuela materna de Jesús de Nazaret.
Ana es patrona de muchas ciudades en diversos países, así como patrona de las mujeres trabajadoras y de los mineros, pues se considera a Jesús el oro y María la plata. También es patrona de las mujeres embarazadas a la hora del parto.
De hecho es común también que a muchas niñas que nacen en El Salvador les pongan como nombre «Ana».