La «guerra del fútbol»
En la historia de El Salvador existió un acontecimiento denominado la guerra del fútbol o la guerra de las 100 horas el cual fue un conflicto armado de unos pocos días que sucedió entre los países de El Salvador y Honduras del 14 al 18 de julio de 1969.
Por qué se llamó la guerra del fútbol
Fue llamada así por la coincidencia de este hecho con los derivados de un partido de fútbol que enfrentó a las selecciones nacionales de Honduras y El Salvador, con motivo de las eliminatorias para la Copa Mundial de Fútbol de 1970, serie que El Salvador ganó dejando fuera a los hondureños.
Estos son los resultados de los partidos de fútbol entre las selecciones de ambos países:
- El 8 de junio de 1969, Tegucigalpa: Honduras – El Salvador 1-0 (0-0 en el descanso).
- El 15 de junio de 1969, San Salvador: El Salvador – Honduras 3-0 (3-0).
- El encuentro de desempate tuvo lugar en la Ciudad de México el 27 de junio de 1969 – El Salvador – Honduras 3-2 (1-2 en el descanso, 2-2 en jornada completa), jugado.
Cabe destacar que en esas eliminatorias El Salvador consiguió su primer pase a una competición mundialista en México 1970, luego de derrotar en los siguientes partidos a la selección de Haití.
Quién le otorgó ese nombre
El nombre con el que se conoce a esta guerra fue acuñado por el reportero polaco Ryszard Kapuściński.
Qué sucedió
En ella se evidenciaron las tensiones políticas entre estos dos países que finalmente los llevaron a un conflicto armado. Fue una guerra breve (duró sólo 4 días). La situación social en ambos países era explosiva y se buscaba por parte de los militares gobernantes una salida conveniente para los grupos en el poder político de cada país.
Los hacendados controlaban la mayor parte de la tierra cultivable en El Salvador. Esto llevó a la emigración constante de campesinos pobres a regiones de Honduras cercanas a la frontera con El Salvador.
En 1969, Honduras decidió realizar una reforma agraria, para lo cual expropiaron y expulsaron a los salvadoreños que habían vivido ahí durante varias generaciones y los que se habían hecho propietarios a base de esfuerzo propio.
Esto generó una persecución de salvadoreños en Honduras y un «regreso» masivo a El Salvador. Esta escalada de tensión fue aprovechada por los gobiernos de ambos países para orientar la atención de sus poblaciones hacia afuera, en vez de los conflictos políticos internos de cada país.
Los medios de comunicación de ambos países jugaron un papel importante, alentando el odio entre hondureños y salvadoreños. Los conservadores en el poder en El Salvador temían que más campesinos implicarían más presiones socioeconómicas en El Salvador, razón por la cual decidieron intervenir militarmente en Honduras.
El 14 de julio de 1969, el ejército salvadoreño lanzó un ataque contra Honduras y consiguió acercarse a la capital hondureña Tegucigalpa. La Organización de Estados Americanos negoció un alto el fuego que entró en vigor el 20 de julio. Las tropas salvadoreñas se retiraron a principios de agosto.
Al final de la guerra, los ejércitos de ambos países encontraron un pretexto para rearmarse y el Mercado Común Centroamericano quedó en ruinas. Bajo las reglas de dicho mercado, la economía salvadoreña (que era la más industrializada en Centroamérica), estaba ganando mucho terreno en relación a la economía hondureña.
Cómo se resolvió
Las dos naciones firmaron el Tratado General de Paz en Lima, Perú el 30 de octubre de 1980 por el cual la disputa fronteriza se resolvería en la Corte Internacional de Justicia.